martes, 17 de agosto de 2010

Cruéscaro

La noche es un toro azul
de donde emergen sueños de espuma.
En la cama se pierden los manotazos
y de tanto mar supongo mi derrota.
Si sintieras este sudor recorriéndome
y este relampagueo de mis ojos
en un incierto destino,
te hablaría la raja de la nuez,
el verso de los giradiscos,
los pañitos de punto adornando
al giradiscos, las sábanas
"cruéscaras" de amor...
Se olvidan las rancheras
como también el asfalto
se olvida de nosotros.

4 comentarios:

Ser paciente tiene su precio... dijo...

Si de sueños escapara,
a la noche yo me diera,
olvidara los columpios,
resbaleras y arenillas.

Si en tormentas escapara,
a la música yo me diera,
tendría que componerte,
para descifrar tus maneras.

Arya dijo...

Llegue a tu blog atravez del susurro de un pez amigo :)

Espero me permitas seguir pasando, me ha gusto mucho tus escritos, tan sinceros, puros y tuyos.

Un saludo cordial.

Víctor dijo...

Perdona, me quedé soñando mientras tu voz me lo leía en voz alta...

Tuve un déjà vu con sábanas blancas enrredadas por nuestras extremidades cansadas de recorrer catedrales al descubierto y desoladas.

Yo dormía. Yo soñaba. Tú sentías.


Obrigado.

Pez Susurro dijo...

al igual que nosotros,
nos olvidamos de nosotros mismos.

noche tras noche...


un abrazo