martes, 23 de febrero de 2010

Calcomanías

No siento si la oscuridad me deja
con el aliento colgado de una antena
o si el pálpito no puede palparse.
Que si a veces he sufrido ha sido por
no dejar de pensar en nosotros,
en esta ruleta de aire que circula
como un papagayo azul en tu aorta
y se desorienta con el ruido mismo.
Minusculísimo enfado el que siento
si dejas la voz tuya en un único
cementerio y no vienes a consolarme
con transfugadas caricias, perlas,
escombros, sábanas o pañuelos.
Pero insistes con la barbilla intermitente
y arrancas de un soplo mi furia
y mis sentimientos. Haces calcomanías
de risa con un poco de tus ojos y
siento que te debo la vida, o dos vidas,
porque de ti han crecido las primeras
lluvias que dejan el rastro del olor
a pueblo mío y a ciudad tuya.

* Para Uve.

3 comentarios:

Víctor Martínez dijo...

Hoy más que nunca he sentido que sin ti no sería lo que soy (no sé si por ser este día "tan especial" ,aunque contigo lo son siempre).

Gracias.

Gracias.

Nunca me cansará de dartelas.

"Seguiré insistiendo con la barbilla intermitente"

Sei tu. Ti amo.

Sergio dijo...

me hiptonizaron el pueblo y la ciudad, allá donde hice mis primeros bocetos sobre la luz y sobre la oscuridad.

inmenso haz.

Mª JOSE dijo...

Hola!! Es la primera vez que visito tu blog la verdad me ha gustado mucho..

Un saludo.